Un grupo de albañiles trabajaba en una obra de remodelación en la zona centro, en la calle Zaragoza.
Todo se desarrollaba con normalidad, hasta que vieron caer a uno de sus compañeros, que estaba encargado de enjarrar una marquesina.
Los involucrados narraron a las autoridades que inmediatamente acudieron en su auxilio, al tiempo que llamaron a los servicios de emergencia, sin embargo al llegar los paramédicos dieron constancia de que lamentablemente el accidentado, un joven de apenas 17 años de edad, había perdido la vida debido a la altura y la forma en que la persona cayó.
La obra fue asegurada por policías en la espera del arribo de servicios periciales para comenzar con las investigaciones.