Denuncian “brutalidad policial” en Jesús María

Frida Fonseca Quezada
Aguascalientes, Ags.– El Observatorio de Violencia Social y de Género de Aguascalientes (OVSG) emitió una enérgica condena contra lo que calificó como un acto de “brutalidad policial” ocurrido el pasado 23 de noviembre en el municipio de Jesús María.
Según lo que la organización denunció, elementos policiacos abrieron fuego contra una familia, hiriendo a tres niñas y a un adolescente, tras realizar una revisión extrajudicial.
Según el posicionamiento del OVSG, los hechos se desencadenaron después de que policías realizaran una revisión arbitraria y presuntamente robaran un celular a dos jóvenes, luego de lo cual los uniformados dispararon en más de 20 ocasiones contra el hogar de las víctimas.
Se detalla que como saldo del ataque reportado por la organización, incluye lesiones en tres niñas de 13, 9 y 5 años de edad, así como en un adolescente de 17 años, quien se encuentra en estado grave de salud.
El Observatorio detalló acciones graves que sugieren un intento de encubrimiento por parte de los oficiales involucrados, pues según la denuncia, tras el tiroteo, los policías se dedicaron a “levantar los casquillos y huyeron del lugar” en lugar de solicitar servicios de emergencia para atender a los heridos.
SI bien se tiene conocimiento de que los elementos ya fueron retirados de sus cargos y llamados a declarar, el organismo civil señala que también hubo autoridades que trataron de encubrir el ataque.
Por lo que para el OVSG, este evento no es un hecho aislado ni accidental, sino el resultado de fallas estructurales, omisión y permisividad tanto del Gobierno del Estado como de los gobiernos municipales, describiendo la situación como un patrón de abuso de poder y criminalización sistemática hacia la juventud de la periferia.
Ante la gravedad de los hechos, la organización exigió la detención inmediata de los elementos que participaron en el ataque y de las autoridades cómplices del encubrimiento; total transparencia sobre los protocolos y controles de confianza; así como la creación de mecanismos civiles de supervisión independiente y reformas estructurales.
Subrayando que: “No permitiremos que estos hechos se normalicen, ni que el brazo armado del Estado vuelva a disparar contra jóvenes y niñas”, advirtiendo en seguida que continuarán documentando y exigiendo garantías de no repetición, recordando finalmente que: “Los estamos observando”.