Aunque la temporada ya terminó, La Casa de los Famosos México sigue dando de qué hablar. Ahora fue Alexis Ayala quien volvió a encender la conversación al reconocer públicamente que su participación en el reality no fue tan rentable como muchos imaginaron, sobre todo si se compara con otros proyectos de su carrera.
En una charla reciente, el actor confesó que el sueldo que recibió por entrar al encierro estuvo muy por debajo de sus expectativas. Lejos de exigir cifras astronómicas, Ayala explicó que el problema fue el contexto personal en el que firmó el contrato, pues atravesaba una etapa financiera complicada que influyó directamente en la negociación.
El intérprete reveló que, días antes de ingresar al programa, se encontraba en una situación económica crítica. Incluso llegó a vender su casa apenas una semana antes de entrar a La Casa, lo que lo colocó en una posición vulnerable frente a la producción y lo llevó a aceptar condiciones menos favorables de las que habría obtenido en otro momento de su vida.
Aunque evitó mencionar montos específicos, Ayala dejó claro que el pago fue inferior a lo que normalmente habría ganado en una telenovela, considerando el tiempo, la exposición y el desgaste emocional que implica un reality de ese nivel. Con ello, buscó aclarar que su inconformidad no nace de la ambición, sino de una comparación lógica entre esfuerzo y retribución.
Dentro del programa, Alexis Ayala se mantuvo como una figura que no pasó desapercibida. Terminó en el sexto lugar y fue el último eliminado de la temporada. Su carácter frontal lo llevó a protagonizar momentos de tensión, especialmente con Dalilah Polanco y Shiky, lo que dividió opiniones tanto entre los habitantes como entre la audiencia.
Sin embargo, no todo fue confrontación. Algunos participantes como Aldo de Nigris, Abelito y Aaron Mercury lo vieron como una figura de apoyo y guía. Junto a Mar Contreras, formó parte del grupo conocido como “La manada”, que tuvo influencia en las estrategias y dinámicas internas del reality.
Frases como “para eso me contrataron” se volvieron parte de su sello dentro de la casa, utilizadas para justificar su estilo directo. Otra declaración recurrente, “estoy aquí para volver a estar en la cima”, dejó ver su deseo de reposicionarse en la industria del entretenimiento.
Pese a su molestia por el tema económico, Ayala reconoció que la exposición le trajo beneficios profesionales. Tras su salida, recibió nuevas propuestas laborales, entre ellas un proyecto cinematográfico que se filmará en Chile el próximo año, lo que confirma que su paso por el reality no fue en vano.
En paralelo, el universo de La Casa de los Famosos México sigue expandiéndose. La productora Rosa María Noguerón expresó públicamente su interés en sumar a la Miss Universo mexicana, Fátima Bosch, para una próxima temporada. Aunque la reina de belleza no ha respondido, la posibilidad ya generó opiniones encontradas y promete, una vez más, polémica asegurada.
