¡El amor entre risas podría haber llegado a su fin! Una bomba estalló en el mundo del espectáculo luego de que Mhoni Vidente soltara tremenda predicción: Eugenio Derbez y Alessandra Rosaldo estarían oficialmente separados… y él ya tendría nueva novia. Sí, aunque parezcan la familia feliz en redes y reality shows, la realidad sería muy distinta.
Según la vidente cubana, la pareja ya habría puesto punto final a su relación hace al menos tres años, pero habrían decidido mantener las apariencias por una razón muy clara: su hija Aitana y los contratos millonarios con plataformas como Prime Video. En resumen: una familia “perfecta”, pero solo en pantalla.
La supuesta infidelidad de Eugenio habría sido el detonante. Mhoni asegura que el comediante ya está muy enamorado de una actriz joven, latina y residente de Los Ángeles, aunque aún no se revela su identidad. Este nuevo romance habría sido la gota que derramó el vaso y que obligaría a los famosos a salir a confirmar su separación públicamente muy pronto.
Pero, ¿cómo reacciona Alessandra? Lejos de publicar un comunicado o negar los rumores, la cantante de Sentidos Opuestos reapareció en redes… con un plot twist digno de telenovela. Subió un video con el icónico intro de “Soñadoras”, novela noventera cuyo tema musical interpretó junto a Chacho Gaytán. ¿Mensaje oculto o simple nostalgia?
Aunque muchos esperaban que usara sus redes para hablar del escándalo, Rosaldo evitó el tema y se limitó a promocionar su próximo live del Método M. Eso sí, la ausencia de una declaración contundente solo avivó más las llamas del rumor.
Cabe recordar que en 2022 ya se había hablado de una posible crisis entre ellos, misma que fue negada. Pero esta vez, Mhoni asegura que ya no hay vuelta atrás: ni compromisos laborales ni “niña chiquita” que detenga el inminente anuncio del divorcio. Y por si fuera poco, todo apunta a que Eugenio ya está listo para “formalizar” con su nueva conquista.
¿Será que la dinastía Derbez se rompe oficialmente? ¿Cuándo explotará la bomba ante los medios? Por ahora, solo nos queda esperar a que alguno de los dos confirme (o desmienta) el drama detrás de la sonrisa familiar que tanto nos vendieron.
Seguiremos soñando… pero con los ojos bien abiertos.
