La guerra en la familia Cuevas está que arde, y esta vez Aída Cuevas se anota otro triunfo legal en contra de su propio hermano, Carlos Cuevas, quien no sólo perdió la demanda millonaria por daño moral, ¡sino que ahora podría terminar pagando hasta los honorarios del abogado que lo venció!
Durante una emisión de alto voltaje en Ventaneando, Pati Chapoy no se guardó nada y soltó la bomba: la demanda por 25 millones de pesos que Carlos interpuso contra Aída fue declarada improcedente desde junio de 2024. Y para dejarlo bien claro, el abogado de la cantante, Enrique González Casanova, se presentó en vivo para confirmar que su clienta salió libre de toda culpa… y con la frente bien en alto.
“Si no fuera porque él ha estado saliendo a decir falsedades absolutas en los medios, no estaríamos dando esta entrevista”, disparó el abogado, dejando claro que la defensa ya se cansó de que Carlos haga circo mediático.
Carlos Cuevas no se rinde… pero ya nadie le cree
Como buen drama de telenovela, el pleito no termina ahí. Carlos Cuevas no se quedó callado y apeló la decisión del juez con la esperanza de que alguien le compre el cuento, pero todo indica que la ley no está de su lado.
Además de la lana, el cantante exigía una disculpa pública y que su hermana se callara para siempre sobre él. Pero la respuesta fue clara: ¡ni perdón ni olvido! Aída no sólo ha salido limpia en este proceso, sino que ya acumula tres pleitos legales contra su hermano, y en los tres ha salido ganadora.
Carlos Cuevas también explota contra Pati Chapoy: “Ya debería retirarse”
Y como si no fuera suficiente el drama entre hermanos, Carlos ahora también arremetió contra Pati Chapoy, acusándola de meterse de más en el caso.
“Debería retirarse”, dijo sin filtro.
¿Celos? ¿Derrota mal digerida? ¿O simple ardor legal?
Carlos aseguró que no quiere ni ver a Chapoy y que ella debería evitarlo, acusándola de dañar su imagen. Pero el público no perdona y las redes ya sentenciaron: “No llores, Carlos… mejor gana una.”
¿Final o intermedio?
Aída Cuevas, por su parte, se mantiene firme y respetuosa, motivada por la fe, el amor a su familia (sí, incluso a la parte tóxica), y con el respaldo de la justicia mexicana.
Pero como buen pleito familiar… esto huele a cuarta temporada.
