¡Quién lo diría! Julián Gil no solo sigue robando suspiros en la pantalla chica, sino que ahora también se consagra como uno de los papás más guapos del espectáculo. Así lo reconoció la revista CARAS, que lo incluyó en su codiciada lista de los “50 Papás más Guapos del Momento”. Y sí, además de ser actor, empresario, conductor y ahora ¡abuelo!, Gil demuestra que el encanto no se jubila… al contrario, madura con estilo.
Con más de tres décadas en la industria, Julián ha demostrado que lo suyo no es solo la apariencia. Su carrera está cargada de éxitos: más de 20 telenovelas, 15 películas y proyectos internacionales que lo han consolidado como un artista versátil y comprometido. Pero eso no es todo: también rompió récords al producir y conducir el programa de televisión en vivo más largo del mundo, un maratón audiovisual que se ganó un Récord Guinness. ¿Alguien más con ese currículum? Pocos.
Como conductor ha brillado en eventos de alto perfil como los Latin American Music Awards y los Premios Balón de Oro de Univision, donde su carisma y conexión con el público lo han convertido en una figura querida tanto frente como detrás de cámaras.
Pero por encima de todos estos logros profesionales, Julián Gil no duda en decir que su papel favorito es el de papá. Y ahora, ¡abuelo con orgullo! Tiene tres hijos: Nicole, quien vive en Madrid y lo convirtió recientemente en abuelo; Juliancito, que radica en Estados Unidos; y Matías, que vive en México. “Nada se compara con la alegría de ver crecer a mis hijos”, confesó el actor al recibir la noticia del reconocimiento. “Y convertirme en abuelo… es una emoción que no puedo describir”.
Actualmente, el galán comparte una nueva aventura con su esposa Valeria Marín en el reality “Secreto de Parejas”, disponible en Canela.TV. En este proyecto, ambos se abren como nunca antes para mostrar cómo fortalecen su relación en medio del mundo del espectáculo, las cámaras y los retos de la vida diaria.
Entre proyectos, paternidad, amores y nietos, Julián Gil demuestra que no hay edad para seguir brillando… y para seguir siendo un rompecorazones de exportación. ¿Quién dijo que ser papá (y abuelo) no podía ser sexy?
