El rock mexicano amaneció de luto: Xava Drago, líder y vocalista de Coda, murió a los 54 años, víctima del cáncer de estómago que lo mantuvo en una dura lucha desde 2024.
La noticia fue confirmada por la propia banda a través de un mensaje que estremeció a sus seguidores:
“Con profunda tristeza compartimos que nuestro amado Xava ha partido. Nuestro corazón está roto”.
Hace apenas unos días, el cantante había conmocionado al público al revelar que los tratamientos médicos ya no estaban funcionando y que se encontraba en la recta final de su vida.
La despedida más honesta: “viví, gocé y amé”
Xava no se fue en silencio. Dejó preparado un mensaje póstumo para sus fans, su familia y todo aquel que lo acompañó en su viaje musical.
“Reconocer que estamos de paso en este mundo es abrazar la vida. Hoy llegué al final y solo me queda decir que la viví a mi manera. Canté, ‘rocanrolie’ y amé cada instante”, escribió.
El músico aseguró que al momento de leerse sus palabras, él ya estaría en paz, al lado de su madre. “Gracias a todos por el amor, la buena vibra y el rock and roll. Me despido con mucho amor”.
Una comunidad rota: el rock lo despide
Las muestras de cariño no tardaron en llegar. Eduardo Carrillo, de Ágora, expresó:
“Tu música trasciende, descansa en paz Xava Drago”.
Jorge Guevara, voz de Caos y exintegrante de Elefante, también le dedicó palabras de admiración:
“Fuiste amigo y maestro, por siempre tu fan y compadre. Descansa en paz, carnal”.
Incluso Talo Chárraga, con quien compartió sus primeros pasos en la banda Ultimátum, recordó su tenacidad:
“Siempre fue un guerrero, con hambre de grandeza. Esa fuerza de vida es lo que más nos deja”.
El disco y el tributo pendiente
Xava alcanzó a ver publicado su álbum “Gracias Infinitas”, lanzado el pasado 16 de agosto en plataformas digitales, un proyecto con el que selló su legado musical.
Además, estaba programado un concierto tributo en la Maraka para el próximo 25 de agosto, donde participarían músicos como Mosy (Ritmo Peligroso), Cha (Fobia) y Salvador Moreno (La Castañeda). Tras su muerte, queda en duda si el evento seguirá adelante o se transformará en un homenaje póstumo.
